Thursday, September 14, 2006

Describir una situación de encienrro.
En el edificio A de la Fac, hay un compendio de copias, pedirlos con mi nombre o con el de la clase. Son seis cuentos de escritores mexicanos y uno español, leerlos.

San Juan de Ulúa


Me encerraron aquí desde hace dos semanas, el crimen: haber robado una hogaza de pan, condena: cinco años. He tenido la suerte de estar en una celda solo con mi alma, ha pasado poco tiempo, pero siento que ha sido una eternidad. Mi única ocupación es contar el tiempo mediante un rayo de luz que entra en la oscuridad.
Tengo hambre, mucha hambre, mis celadores sólo me traen migajas y agua podrida que ni las ratas la quieren, he olvidado la forma es la que quema el sol, aún escucho a lo lejos el ir y venir de las olas, siento que moriré antes de cumplir mi condena.
La oscuridad enegrece mi alma y la soledad me volverá loco. Saber que el hambre me metió aquí y es el hambre la que me matará.
Hace mucho frío, la construcción filtra el agua, no la puedo ver, pero la siento en mis pies y el olor de mis eses asfixia, no puedo respirar, la oscuridad me embriaga, ando a tientas buscando algo, aunque sé que estoy solo.

Mis manos reflejan las de alguien mayor, parece que hay más agua aquí que afuera, siento frío hasta los huesos, las escasas ropas que tenía ahora me quedan olgadas ¿Se habrán olvidado de mi? ni siquiera el guardia que viene a medrentarme ha pasado.

No puedo ver, a veces olvido si la oscuridad es porque no hay luz o si me he quedado ciengo, sin embargo en ocasiones todavía puedo ver el rayito de luz y me da la esperanza de que es de día y cuando anochece es la misma muerte la que reina este lugar de pesadilla, me duele la cabeza y estoy tan sucio que me doy asco, el olor que emana de mi piel es nauseabundo.

Sé que moriré pero no sé cuando, me siento tan débil que tendrían que cargarme para sacrme de aquí, no recuerdo como es mi rostro y mi nombre ya no sirve más, estoy en el olvido, en el hoyo del olvido, donde todo es negro y parece que no pasa el tiempo.
¿Qué tiene de especial un día del otro, cuándo no se ve nada? Moriré sé que morire, en el más recóndito de los olvidos.
Gabriela

Sunday, September 10, 2006

Relato de un resentido


¿Qué, por qué las odio? No lo sé con exactitud, tal vez por lo empalagosamente buenas que pueden llegar a ser, por hipócritas, mentirosas, débiles o bien, por ser la causa del pecado.
Soy un viejo y emirtaño que misa con misa, no dejo de recrimicrar a las mujeres, asó como tampoco las dejo ir del confesionario sin duras penitencias.
A pesar de no estar muy seguro del por qué las detesto, me niego a aceptar que es por rencores pasados, no tiene nada que ver que de niño haya visto como mi madre le era infiel a mi padre ni como lo aventó escaleras abajo, la vez en que murió y no, mi odio a ellas no acrecentó cuando en la adolescencia una prostituto infectó de sida a mi hermano ni tampoco porque mi primer novia me haya ocultado su embarazo y luego, para ocultar su error, abandonó en un basurero a mi hijo ya muerto, lo cierto es por decepción me hice cura.

Es cierto, no sé por qué siento esa repulsión hacia ellas, pero sí sé cómo desahogarme...

Salgo amparado por la oscuridad de las noches y golpe a cada mujer que encuentro hasta dejarla inconciente; me gusta amarrarlas en parejas, vivas con muertas y dejarlas hasta que las vivas mueran lentamente por el hambre y el horror de ver a su compañera sangrando y putrefacta, lástima ya no puedo hacerlo más.
La otra noche mientras me deleitaba con dos muchachas, fracturando uno a uno sus huesos, fuí sorprendido por una niña no mayor de diez años, me delató y ahora estoy en prisión, esperando mi condena.
Ya no tengo dudas de que la mujer es una maldita desde temprana edad.

Diana
De estas parejas de palabras, escoger una y de ellas, crear a un personaje.
- prostituta - femme fatal
- esquizofrénico- paranoíco
- asesino serial - canival
- violador- maniaco sexual
- misógino- machista
- suicida- depresivo
- fantasma-alma en pena